Ante problemas como el narcotráfico, el tráfico de personas y de órganos, entre otros casos de delincuencia organizada internacional, el concepto mal aplicado de "soberanía" ha imposibilitado alcanzar los mandatos jurídicos globalizados, y por consecuencia la creación de instituciones globalizadas de combate a la criminalidad, expresó el investigador del Instituto de Investigaciones Jurídicas de la UNAM Miguel Carbonell Sánchez.
El catedrático dijo que la globalización ahí está y no se puede pensar en que no existe, pues hay diversos fenómenos que la reflejan y los estados nacionales, deben aprovechar esta globalización. En el caso de México, señaló que tiene una ventaja de carácter geopolítico, por el hecho de compartir 3 mil kilómetros de frontera con Estados Unidos, por lo que los procesos de globalización en México se aprovechan.
Carbonell Sánchez precisó que no existe sólo una globalización, sino que hay diferentes procesos globalizadores; hasta el momento, dijo, se han presentado algunos como la economía y el intercambio de bienes, dejando fuera el de los servicios, pero hay algunos como el intercambio financiero, además de los insumos culturales, por lo que no existe un saldo negativo de la globalización.
Como parte de su ponencia en el coloquio iberoamericano "Estado Constitucional y Sociedad", realizado por el cuerpo académico "Ratio Legis" de la Facultad de Derecho de la Universidad Veracruzana, expresó que a pesar de todo el proceso de globalización que existe actualmente, esta globalización no ha alcanzado el "mundo de lo jurídico".
Explicó que el derecho en general como fenómeno está llegando tarde a la globalización, de ahí que su propuesta es que se creen instituciones jurídicas globales, pues existen problemas globales que hay que resolver. "Estamos tratando problemas de alcance multinacional con instituciones jurídicas locales, y así no se pude, pues hay situaciones de criminalidad organizada, hoy por hoy hay cárteles de la droga, cárteles del tráfico de órganos de personas, los grupos dedicados al contrabando no conocen de fronteras o aduanas", afirmó.
Subrayó que si el problema es de orden internacional, se debe tener también una globalización del derecho, sin embargo hay personas que se oponen a esto, debido al tema de la "soberanía". En ese sentido explicó que la soberanía sirve en la medida que sea útil para proteger los derechos de las personas. "La soberanía no es un concepto que se autojustifique, pues la soberanía desde el punto de vista jurídico es la capacidad de un pueblo o de una comunidad política para autodeterminarse y esa capacidad debe estar al servicio de los derechos fundamentales, no de ideas etéreas", señaló.
Enfatizó que de continuar viendo de forma equivocada la soberanía, no se podrán tener las instituciones que puedan actuar globalmente o dimensionar el alcance geográfico del combate a este tipo de cuestiones delictivas.
Fuente: http://www.oem.com.mx/diariodexalapa/notas/n1552543.htm
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